Muy de mañana vamos dejando la experiencia de haber ascendido nuestro primer volcán. Nos dirigimos hasta la localidad de CURAREHUE, para comprar algo de pan e internarnos hacia el villorrio denominado REIGOLIL en la Andina Cordillera de la Región de la Araucanía. Carabineros nos indica que vamos por buen camino hacia Los Nevados de Sollipulli. Es un camino muy secundario, sin embargo, en muy buen estado. A lo lejos se divisa nuestro objetivo, consultamos como internarnos, pero no nos queda claro, tratamos de avanzar por una huella que nos genera muchas dudas. Sobre nuestras cabezas están los Nevados, pero aún así, no sabemos donde terminaremos si nos internamos por los bosques.
Desolados por el intento seguimos avanzando por el camino secundario, topándonos con el lago CABURGUA en su parte norte. Hemos avanzado algo de 80 kilómetros y nos detiene por el calor reinante el lago COLICO, Pareciera que de los Nevados nos hemos olvidado, algunos comentan, que bañarnos en este hermoso lago, ya justifica el viaje del día. Todos al agua.
La tarde avanza y nadie comenta sobre los Nevados, aún así llegamos hasta las localidades de CUNCO y posteriormente a MELIPEUCO, pasando a los pies del Volcán LLAIMA. Nos encontramos en el acceso Norte del SOLLIPULLI. Para eso nos internamos por el sector denominado ALPEHUE, parece que nos animamos y la idea renace de llegar, no antes se sufrir una larga y fuerte pendiente (cuesta). Es increíble lo que subimos, tal vez 600 a 700 metros de desnivel. La altura nos da la bienvenida, las Araucarias también. Luis sabe donde nos dirigimos, los demás no creo, En el ocaso del día por fin llegamos al “Hotel Nevados del Sollipulli “.Nos da la bienvenida su propietario el Sr. Gibson y le recordamos la invitación que nos había realizado un tiempo atrás. Nos invita acampar y a la vez nos indica la huella que nos llevará a nuestro segundo objetivo, sino antes, 12 horas de viaje y muchas dudasMuy de mañana, al día siguiente todo el equipo, (Navarro, Castillo, Alvarado, Mora, Avendaño, pzorro e invitados) emprendimos el ascenso por un sorprendente bosque de longevas Araucarias. Es un encanto ir subiendo por una marcada huella que nos lleva al final del bosque y al inicio de la base del Nevado. Es increíble el cambio de la zona que nos toca avanzar; es un pedregal de millones de pequeñas rocas volcánicas. Vemos no muy lejos, en lo alto, la base del cráter. Los ocho que vamos subiendo recibimos la visita de un viento puelche, que nos dificulta el avanzar los últimos metros.
Sinceramente LOS NEVADOS DEL SOLLIPULLI son extraordinariamente bellos. Posee varias cumbres y en centro o cráter una masa glaciada de varios kilómetros cuadrados. El viento nos acompaña hasta la cumbre, sacamos las fotos de rigor y la lógica nos indica que debemos bajar inmediatamente a nuestro campamento, con nuestra segunda cumbre alcanzada.
Patricio Vásquez Fernández // pzorro // 2008
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